viernes, 8 de mayo de 2009

Rosa María y el manjar

Me gusta Rosa María Palacios. Tiene un no sé qué que me atrae y hace que religiosamente la vea cada noche. Qué será. ¿Acaso su inteligencia, su manera de hablar? ¿Acaso sus ojos claros o su cabello castaño? ¿O será la seguridad que proyecta, su experiencia, su atrevimiento? ¿Su sorna y gracia, tal vez? No sé. Qué será. Pero me hipnotiza, me hace sonreír, reclamar, enojarme, indignarme, creer, descreer, divertirme, entristecerme y sentirme feliz ante la extraña y dura realidad. Y todo a las 23 horas, de lunes a viernes. Sé que tiene detractores, pero no me importan. Ella es lo máximo y me encanta. Hasta me atrevo a decir que es mi tipo... y me sonrojo.

Y hablando de gustos exquisitos: Hace unos días comí el mejor manjar blanco de mi vida treintañera. Una delicatessen digna de cualquier mesa sibarita. Una preciosura del sabor. Una caricia para los sentidos. Un orgasmo gastronómico. Su nombre: Soledad. Su procedencia: Caraz Dulzura. Búsquenlo y gócenlo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

tu tipo??????
ay leonnnnnnnnnnnn

Anónimo dijo...

Ella es lo máximo, me ispira todo lo que mensionaste y más y creo que a todos sus televidentes tambien. Todo aquel que busca la verdad y se esfuerza por mostrarla por arriesgado que esto abeces sea siempre tendra mi admiracion y sera mi inspiracion. Claro que para que fuera mi tipo tendria yo que ser lesviana jeje
Aurea

Raulín dijo...

Es su escote Kikín, es su escote...

Anónimo dijo...

Ay pero si es vieja y refeaaaa!!!!!!!!

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