martes, 15 de abril de 2008

Vallejo / LXX / Vallejo

A veces pienso que si algún día tengo un hijo le pondré de nombre Vallejo. Vallejo León. Pero luego pienso que lo que es del César es de César Vallejo y ya... Pero quiero tanto al poeta que en ocasiones me asalta la idea de hacer algo por él. No sé... algo...


Anoche, como otras noches, lo vi sentado, de perfil, sosteniendo entre sus manos el hilo que detiene el ascenso de un globo rojo a los cielos. Vallejo. Y no fue un sueño ni una alucinación porque realmente él está aquí, todo de negro, mirándome con el rabillo de su ojo izquierdo.

Dos veces estuve en París y dos veces visité su tumba en el Montparnasse: un lugar de culto donde gente de todos lados viene a estar un rato con él y agradecerle. Vallejo, una flor para ti, una vela, una foto, una piedra, un poema...


4 comentarios:

Anónimo dijo...

mas que vallejo
seria
pellejo leon
ji-ji-ji
vale el post

raggs

Anónimo dijo...

Y por qué Vallejo mira ese globo?
Es el mundo? Es un ausentismo increíble o un privilegiado pensador. Por la nota se entiende lo último.

Anónimo dijo...

ME GUSTA LA SECCIÓN DE VALLEJO DEBERIAS COLOCAR SUS POEMAS
Tal vez una agenda cultural
que te parece?

Mónica

Tinta Absuelta dijo...

Es un gusto leer a Vallejo, Señor.